Las venas disponen de unas válvulas para garantizar un buen flujo sanguíneo de retorno, cuando estas no funcionan de forma adecuada se forman las varices.
Las varices se forman de manera progresiva, pero hay distintos síntomas que debemos tener en cuenta, ya que nos alertan de cuando pueden empezar a manifestarse, pesadez en las piernas, dolor, hinchazón en los tobillos, aparición de venitas pequeñas y finas pero muy visibles, pequeños derrames, etc.
La mayoría de las venas varicosas y arañas vasculares aparecen en las piernas debido a la presión del peso corporal, la fuerza de la gravedad, y la tarea de llevar la sangre desde la parte inferior del cuerpo hasta el corazón.
En comparación con otras venas en el cuerpo, las venas de las piernas tienen el difícil trabajo de llevar la sangre de vuelta al corazón. Tienen que soportar una mayor presión y esta presión puede ser más fuerte que las válvulas de las venas.